El desarrollo fetal es constante y empiezan a diferenciarse los labios, dedos…, iniciándose la osificación.
En el cuarto mes la placenta completa el proceso de inserción.
Sobre la semana 17-18 los movimientos fetales son más fuertes y los empezarás a notar.
Respecto a las medidas fetales en longitud completa, debéis saber que es una medida que no se puede realizar porque los futuros bebés están en “posición fetal”, o sea, con las piernas y el cuerpo doblado y en diferente eje. Así como las tablas de medidas del ecógrafo siempre hacen una estimación de peso, no así ocurre con la longitud total del feto. Las medidas que se os dicen están basadas en otras tablas realizadas en amplios estudios y hay que decir que hay mucha variabilidad de unas embarazadas a otras. Por tanto, no debéis preocuparos si os decimos aquí unas medidas aproximadas y vuestra matrona o ginecólogo os dice otras.
Realmente en este segundo trimestre lo importante son las medidas de las diferentes partes del feto: la cabeza (diámetro biparietal, DBP, circunferencia cefálica, CC), las piernas (longitud de fémur, LF), y el abdomen (circunferencia abdominal, CA), principalmente. Si estas medidas están bien, el bebé medirá lo que corresponde, con las variaciones propias de los genes que los padres le han pasado. Por poner un ejemplo, si los padres no son muy altos, lo normal es que la longitud del fémur de su hijo no sea muy grande. Pincha aquí para saber más sobre las medidas de tu bebé.
En este sentido, sobre la semana 20 el feto mide unos 18 cm, de longitud total. Al final de este trimestre tu hijo pesará sobre los 800 gramos y medirá unos 32 cm, todo ello aproximado.
En este segundo trimestre, el embarazo alcanza posiblemente el estado ideal, desapareciendo las náuseas y el cansancio, pudiendo la gestante realizar su actividad habitual.
ECOGRAFÍA DE LA SEMANA 20.
Entre la semana 18 y 22 se realiza la ecografía más importante de todo el embarazo, llamada ecografía de “la semana 20”. Es la ecografía morfológica, donde pueden ser visibles la mayoría de las estructuras del bebé pudiendo diagnosticar gran parte de las malformaciones y alteraciones fetales. Es como un “chequeo” completo fetal.
La ecografía se realiza en esta semana básicamente porque el límite legal en nuestro país para interrumpir la gestación por malformaciones es la semana 22.
En algunas ocasiones puede que esta ecografía, y en ocasiones otras durante todo el embarazo, se repita a los pocos días o a la semana, para visualizar estructuras que por diferentes motivos (posición fetal, mala transmisión ultrasónica materna, reevaluar imágenes en otro momento), no se han podido valorar en la ecografía anterior.
Al final del sexto mes, el útero sobrepasa el ombligo y puedes haber aumentado como media unos 6 kilos de peso, lo que hace que se modifique el centro de gravedad y puedas sentir dificultad para los movimientos habituales. Tu hijo puede responder a sonidos y abrir los ojos.
De entre las determinaciones analíticas solicitadas al final de este trimestre, destaca la prueba del azúcar o Test de O’Sullivan. Su normalidad descarta la diabetes gestacional. Si la prueba saliera alterada se confirmaría el diagnóstico o no, con los resultados de otra prueba de sobrecarga oral de glucosa, llamada popularmente “prueba larga”.
No desesperes si el diagnóstico de diabetes gestacional se confirma, ya que no conlleva un aumento de malformaciones. Pero es fundamental que te disciplines, controles tu dieta y realices ejercicio de forma habitual para evitar posibles complicaciones perinatales.
En algunos casos si no se consigue un buen control de la diabetes gestacional sería necesario la utilización de insulina, que se administra de forma individualizada y es completamente inocua para el bebé.